Qué lindos días he pasado en Colonia!! Es una ciudad increíble, que con toda razón está considerada patrimonio histórico de la humanidad, porque eso es , como si se hubiera detenido el tiempo luce hermosa, muy cuidada por la generación actual para que siga manteniendo su apariencia original.
Las edificaciones conservan los dos tipos de construcción de sus atacantes, la portuguesa se reconoce porque por ejemplo, no tenía vereda, la española sí , y curiosamente, plantaban los árboles en la acera :o)), yo imaginaba el tránsito de la actualidad y da risa pensarlo, sería imposible.
Toda la ciudad es especial pero sobre todo, qué tranquilidad se vive más allá de Colonia, en todos los pueblos que visitamos en Uruguay. Lo mismo sucede con nuestras provincias del interior. La gente es tan agradable...amables, saludan con la mano a los que pasamos con auto porque sí nomás, se toman el tiempo necesario para hacer cada cosa, nosotros (los citadinos) andamos como locos, tocando bocinazos, corriendo no sé detrás de qué, queriendo llegar rápido sin que exista un motivo para ello, y aún cuando se quiera escapar, a la larga estámos metidos dentro del torbellino.
Es bueno, tal vez acordarse que se viviría mejor sin tanta ansiedad como la que repartimos en el día a día, apurándonos a beber la vida.
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